Impulsando la reducción de carbono

Año tras año estamos reduciendo nuestras emisiones de carbono.

Nuestro reciente estudio de relevancia ha catalogado al cambio climático como principal prioridad para nuestros agentes interesados, quienes esperan una ayuda cada vez mayor por parte de las empresas para evitar las peores consecuencias del cambio climático. Si bien hemos alcanzado una reducción del 31 % respecto a los últimos diez años, al tiempo que hemos seguido desarrollando nuestro negocio, somos conscientes de que podemos ir más allá y hacerlo más rápido.

En 2020/2021, pedimos a los consultores que optimizaran nuestra hoja de ruta de descarbonización.

Nos complace anunciar nuestro nuevo compromiso con un objetivo basado en la ciencia para el año 2030, que requerirá la reducción absoluta de las emisiones de CO₂e por tonelada de producción un 46 % en comparación con el año 2019, y alcanzar Emisiones de Carbono Cero en 2050.

En los próximos meses, solicitaremos la validación de nuestro objetivo desde la iniciativa de Objetivos Basados en la Ciencia (SBTi, por sus siglas en inglés), allanando el camino para que nuestro packaging circular desempeñe un papel de peso ayudando a las marcas y consumidores a reducir su huella de carbono.

AHORA Y EN EL FUTURO

En 2030, alcanzaremos una reducción absoluta de nuestras emisiones de CO₂e por tonelada de producción un 46 % en comparación con el año 2019, y alcanzaremos Emisiones de Carbono Cero en 2050.

¿Cómo?

Estamos realizando inversiones estratégicas en fuentes de energía renovables, electricidad ecológica y eficiencia energética

• Transformación del vapor de la producción en calefacción para nuestras instalaciones

• Expansión del digestor anaeróbico

• Contratación de electricidad ecológica

• Turbinas de gas aeroderivadas

Estamos estableciendo nuevos estándares en materia de eficiencia de los combustibles, así como pasándonos a la energía solar, eólica, geotérmica, hidroeléctrica e hidrógeno cuando resulta posible. Hasta la fecha, hemos conseguido una reducción del 23 % de las emisiones de CO2e por tonelada de producción en condiciones equivalentes desde 2015, lo que nos sitúa por delante de nuestro objetivo. Esto se ha debido principalmente a la inversión en la mejora de los equipos y las compras de energía ecológica en nuestras fábricas de papel.