La tecnología al servicio de los embalajes

La tecnología ha provocado el mayor cambio que se haya producido nunca en los embalajes. No se producen cajas, o contenedores, ni envases ni embalajes.
En la actualidad, se producen envases y embalajes activos e inteligentes y que responden a los nuevos retos de consumo.

Las falsificaciones en España provocan pérdidas a las marcas de 8.800 millones de euros. Para tratar de evitar esto, los embalajes disponen de sistemas anti falsificaciones que ahorrarán millones a las grandes empresas, sobre todo de artículos de lujo.

El embalaje, por otro lado, se vuelve en un embajador de la marca, tanto cuando la distribución se produce a través del comercio electrónico, como en el punto de venta. Así pues, la industria se actualiza y permite a través de la impresión digital la personalización absoluta que identifique tanto la marca como el producto a lo largo de la cadena de valor.

Gracias al comercio internacional los productos viajan a lo largo de todo el mundo. Y la tecnología se pone al servicio de este tránsito con etiquetas RFDI que permiten rastrear y monitorizar cualquier producto esté donde esté.

Además, se puede imprimir un código QR que nos amplíe la información de los productos envasados, y de sus características sin tener que abrir el envase.

Por otro lado, los envases activos evitan el despilfarro de alimentos. Según la FAO, un tercio de los alimentos producidos para el consumo humano se pierde o desperdicia en todo el mundo. Esto supone una pérdida de 1.300 toneladas al año.

Contar con envases activos que informen sobre el deterioro de los alimentos, su estado de conservación y su vida útil, ayudará a los consumidores a decidir mejor sobre su consumo.

E introducir desde sensores de calidad, humedad, o protectores de su frescura son algunas de las herramientas que la tecnología está suministrado para evitar el desperdicio de alimentos.

¿Cuál de todas estas tecnologías puede influir más en la cadena de suministro? DS Smith cuenta con nuestros Pack Right Center donde diseñadores e ingenieros se unen a nuestro clientes para localizar la solución óptima para un embalaje y para toda la cadena de suministro.

En síntesis, nuestra propuesta de valor es ayudar a nuestros clientes a que aumenten sus ventas, ayudarles a reducir costes y ayudarles a controlar sus gastos.