Packaging y e-commerce, la pareja perfecta

Navegamos por la red buscando lo que queremos comprar, y tras el último click que cierra la transacción, ya solo pensamos en que llegue a casa el codiciado paquete. La venta online pone a prueba nuestra paciencia y, cuando al fin llega el mensajero, podemos vivir un momento ilusionante o decepcionante. En un primer momento, ¿cuál es la diferencia? El embalaje.

Los compradores online no siempre son conscientes, pero el packaging es uno de los elementos que más evocan la experiencia de consumo. Es la cara visible de quien nos vende el producto, al menos antes de abrirlo. Por eso, tiene un importante impacto en la percepción de la marca y es responsable de desencadenar en el comprador dos emociones opuestas: desilusión o vinculación con la marca.

Queremos que el paquete que llega a casa sea ‘bonito’. Pero no es el único papel que juega el packaging en el comercio a distancia. Ni mucho menos. De hecho, es el responsable de que el producto llegue a nuestras manos en perfectas condiciones, protegiendo y salvaguardando sus propiedades. Además, este aspecto es muy importante desde el punto de vista del vendedor, ya que influirá de manera muy notable en los costes del negocio. Si el producto llega deteriorado o en mal estado, implicará devoluciones y disminución de las ventas.

Las empresas dedicadas a la venta online deberán tener esto muy en cuenta y pensar no sólo en el tipo de embalaje que necesitan, sino en el proveedor que les proporcionará el packaging más adecuado. En el e-commerce, el diseño exterior puede ser el factor que impulse las ventas y beneficios de una compañía por tres razones clave: transporta, protege y crea un impacto emocional positivo.

Para estar seguros de que cumplirá con todos sus cometidos, es fundamental contar con un partner adecuado, una compañía que sepa cubrir las necesidades y superar las expectativas de quienes se dedican al e-commerce, para que puedan crear esta pareja perfecta, el binomio ideal entre la venta a distancia y el embalaje. Conociendo la importancia, las empresas no deberían acudir al proveedor más económico, porque al final, creando una mala experiencia de cliente, acabará resultando más caro. Tienen que tener en cuenta otros factores, estar seguros de que se entienden sus requisitos y preferencias, que el producto está hecho a la medida de sus necesidades.

Si a estas alturas sigues pensando que el embalaje no genera un impacto, te daremos otro argumento. Si has visto la película “Náufrago” (Robert Zemeckis, 2000), protagonizada por Tom Hanks, seguro que recuerdas los paquetes de una famosa empresa de mensajería americana y su relevancia para la trama, el desarrollo del argumento y, sobre todo, el final. Protección e impresión positiva, la perfecta relación entre el packaging y el e-commerce.