food drinks.jpg

Diez ventajas… y más del packaging para el lineal

Las empresas quieren que sus productos lleguen a más consumidores, que se diferencien de la competencia, que su cliente –retail- venda más y además ahorrar en costes logísticos.

Todas esas condiciones se pueden conseguir con el packaging para el lineal. Te contamos más de diez ventajas de este sistema que te ofrecemos desde DS Smith: ventajas desde el punto de vista del retail y consumidor y ventajas para el fabricante y la cadena de suministro:

  1. Permite colocar más mercancía y más variedad en la estantería. Los embalajes se ajustan a las dimensiones de los lineales y se optimiza el espacio.
  2. La reposición de producto es más rápida porque solo hay que sustituir el embalaje vacío por el embalaje con la mercancía ya preparada y dispuesta para que los consumidores la cojan.
  3. Mayor disponibilidad de los productos para los consumidores y por tanto, más posibilidad de venta. Es más difícil que la estantería quede vacía y que no haya suministro de un producto
  4. Comunicación de marca y promociones. Con el packaging directo para el lineal la marca mantiene una comunicación directa con el consumidor y los puntos de contacto visual se multiplican. Además se pueden completar con promociones directas que se gestionan desde el propio fabricante del producto.
  5. Se pueden conseguir más lanzamientos con éxito ya que la marca está siempre visible, y los productos son de fácil acceso para los consumidores, con una alta capacidad de reposición.
  6. Se consigue un merchandising óptimo con una coherencia entre el embalaje y el envase del producto, que incrementa los puntos de visualización de la marca
  7. Mayor visibilidad de los productos y facilidad de movimientos para los compradores, ya que todo el embalaje y envase mantienen una misma marca.

Pero las ventajas no terminan aquí, porque el packaging para el lineal también resulta beneficioso a lo largo de la cadena de suministro, sobre todo en el ahorro de costes. Alguna de las ventajas son:

  1. Se pueden expedir más productos por palé, por lo que se pueden transportar más unidades. Además se reduce el movimiento por palé que también supone un ahorro de costes.
  2. Si se consiguen expedir más productos por palé se necesitarán menos vehículos de reparto. Por lo que esta ventaja es doble.  Ahorro en costes logísticos y ahorro medioambiental porque reducimos las emisiones contaminantes
  3. Gracias a la posibilidad de expedir con mayor rapidez los productos e incrementar la rotación,  se requiere menos espacio para embalajes vacíos y menos espacio para producto terminado. De nuevo ahorro en costes de almacenamiento  por reducción de costes de inventario.